OSTEOPOROSIS

Ya que el pasado 20 de octubre fue el día internacional de la osteoporosis, hoy he decidido hacer referencia a ella explicando un poco en qué consiste.

Es más frecuente en mujeres (aunque también pueden sufrirla los hombres, sobre todo de edad avanzada). En el caso de España, se estima que 2 millones de mujeres tienen osteoporosis. De hecho, la prevalencia en la población postmenopáusica es del 25%, es decir, 1 de cada 4 mujeres tiene esta enfermedad que ocasiona unas 25.000 fracturas al año.

La osteoporosis es una enfermedad de los huesos que se caracteriza por una disminución de la densidad ósea, lo que conlleva a una mayor fragilidad y riesgo de sufrir fracturas.

En las causas de la osteoporosis se puede destacar que influye la cantidad de masa ósea que se adquiere hasta llegar a ser adulto y la pérdida que se produce por la vejez. También intervienen otros factores como los hereditarios y genéticos. La desnutrición, la mala alimentación, el escaso ejercicio físico y la administración de algunos fármacos también pueden favorecer la aparición de la osteoporosis. La menopausia es uno de los factores que más influye, ya que la desaparición de la función ovárica provoca una disminución en la masa ósea.

Su diagnóstico es difícil ya que es una de las “epidemias silenciosas” por ser casi asintomática. En muchas ocasiones, las personas sufren fracturas óseas sin saber que padecen esa enfermedad. Hoy en día, hay muchas lagunas en el conocimiento de esta enfermedad por lo que es difícil establecer unos criterios de diagnóstico, claros y contundentes. Entre ellos se destacaría la densitometría ósea, para medir la masa ósea; y algunos análisis de orina y sangre para descartar que sea causada por alguna infección.

El tratamiento incluye:

Medicamentos para fortalecer los huesos

Medicamentos utilizados para la osteoporosis: como estrógenos, calcitonina (hormona que estimula la producción de densidad ósea), bifosfonatos (utilizados para las mujeres postmenopáusicas para prevenir y tratar la enfermedad).

Esto se puede acompañar de cambios en el estilo de vida como hacer ejercicio para incrementar la densidad ósea, en adultos mayores, y para evitar fracturas; complementos de Calcio, magnesio y vitamina D (evitar los aportes de vitamina A porque se ha demostrado que aumenta el riesgo de fractura), suspender los malos hábitos (tabaquismo y alcohol) y sobre todo, prevenir las caídas.

La osteoporosis puede provocar que una persona llegue a estar incapacitada a raíz de los huesos debilitados. Las fracturas de cadera son una de las principales razones por las que las personas son internadas en asilos para ancianos.