¿VIVO O MUERTO?

En múltiples ocasiones hemos oído hablar de “COMA”, “ESTADO VEGETATIVO” y “MUERTE CEREBRAL”, pero… ¿cuáles son las diferencias entre ellos?

Empezaremos por el coma:

El coma es un estado en el que la persona se encuentra dormida, totalmente inconsciente y con ausencia de respuesta cerebral. Aunque está viva, no puede realizar por sí misma sus funciones vitales (como comer o respirar) y sus ojos están cerrados, sin responder a estímulos. La mayoría de las veces este estado dura de 2 a 4 semanas, pero hay pacientes en los que se prolonga años.

El estado vegetativo:

Es posterior al coma. Después de las 2-4 semanas de este, la persona va recuperándose, empieza a desarrollar la capacidad de oír y a estar alerta de lo que ocurre a su alrededor, a pesar de no poder interactuar con el medio. 

En este estado, a diferencia del coma, la persona ya puede respirar por sí misma, conserva los ciclos de sueño y vigilia y sus constantes están estables (temperatura, presión arterial, frecuencia cardíaca…). Responde ligeramente a estímulos tales como cerrar el puño o levantar una mano, pero, aunque ya es capaz de abrir los ojos, se presenta con la mirada perdida.

Este estado no es irreversible, va a depender de la causa que ocasionó el daño y del tiempo transcurrido. A mayor tiempo, peor pronóstico.

Y por último muerte cerebral:

“Muerte basada en la ausencia total de funciones neurológicas”

Es el cese de todas las funciones del cerebro. Como resultado, se bloquea el aporte de sangre y el paciente muere.

Como el cerebro es el órgano motor de las funciones vitales y el que envía los estímulos a todos los demás órganos, el paciente estará conectado a una máquina que respire por él, medicamentos que mantengan las constantes… El corazón seguirá latiendo mientras tenga oxígeno, pero en el momento que se retire el respirador, dejará de funcionar.

A diferencia de los anteriores es un estado totalmente irreversible ya que, aunque tengan máquinas que "vivan" por él, está oficialmente muerto.

a la izquierda se puede observar un cerebro vivo con aporte de
 riego sanguíneo  y a la derecha, uno en muerte cerebral