TIPOS:
1.
Espina bífida oculta: aunque la vértebra
no se encuentra perfectamente unida, la médula permanece en su canal espinal,
por lo que puede ser totalmente asintomática (la persona que la padezca puede
pasar toda su vida sin saberlo). Aún así, en la mayoría de personas se
manifiesta con un mechón de pelo en la zona de la vértebra sin cerrar.
Las mujeres que tienen esta patología, deben solicitar a su
médico una dosis más elevada de ácido fólico cuando se vaya a quedar embarazada.
2.
Meningocele: se produce cuando se forma
un saco que sobresale del canal espinal. Contiene las meninges y líquido
cefalorraquídeo (LCR). Al no verse afectados los nervios, no suele haber
ninguna discapacidad. Es la forma menos común.
3.
Mielomeningocele: es la más común.
Aquí el saco o quiste, no solo contiene las meninges y LCR, sino que además parte de los nervios de
la médula espinal impidiendo que ésta se desarrolle con normalidad. Como
consecuencia hay cierta parálisis por debajo de la zona del quiste. Mucha gente con esta forma de la
enfermedad tiene problemas intestinales y de la vejiga debido a daño en los
nervios que van al intestino o a la vejiga. Normalmente se acompaña de
hidrocefalia (aumento del LCR en el cráneo)
Grado de afectación según la localización del daño |
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